jueves, 25 de noviembre de 2010


El día de las mariposas.

Pedro Garcia, Ciudad  Natural
Por. Jeudith Rodríguez.

Un hombre viola a una mujer, eso es violencia. Una mujer gana menos que un hombre en el mismo puesto de trabajo, eso es violencia. Un adolescente maltrata a su novia, eso es violencia. Un grupo de amigos le grita cosas a una mujer solo para demostrar su “hombría”, eso es violencia. Un marido obliga a su mujer a prostituirse, eso es violencia. Un hombre cree que “su” mujer es “su” objeto, eso es violencia. Y todo eso es responsabilidad nuestra. De todos y todas.

Cada 25 de noviembre se celebra en todo el mundo el “Día de la no violencia contra la mujer”. Esa fecha conmemora el asesinato de las tres hermanas Mirabal, el 25 de noviembre de 1960, militantes opositoras a la dictadura que ejerció, por más de 30 años, Leónidas Trujillo en la República Dominicana.

Según la “Declaración sobre la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer”, emitida el 20 de diciembre de 1993, “se entiende por violencia contra la mujer a todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.
Una travesti golpeada por un policía; un marido o hijo que esperan, naturalmente, que su esposa o madre les prepare la comida; un hombre o, por qué no, una mujer que llama “puta” a una chica por ejercer libremente su sexualidad, son hechos que se repiten diariamente y poco se cuestionan. A pesar de que se condena a un violador casi unánimemente, a diario se reproducen este tipo de situaciones de violencia que pasan desapercibidas, que son capilares y que van construyendo y legitimando actitudes violentas. Por consiguiente, aunque sea un punto central, la violencia contra la mujer no terminará con las violaciones, si no el día que entre todos y todas construyamos relaciones de igualdad y respeto entre (todos) los géneros.

El artículo 2° de la declaración mencionada anteriormente plantea qué es violencia sobre la mujer: la violencia física, sexual y psicológica que se produzca en la familia, incluidos los malos tratos, el abuso sexual de las niñas en el hogar, la violencia relacionada con la dote, la violación por el marido, la mutilación genital femenina, la violencia relacionada con la explotación; la violencia física, sexual y psicológica perpetrada dentro de la comunidad en general, inclusive la violación, el abuso sexual, el acoso y la intimidación sexuales en el trabajo, en instituciones educacionales, la trata de mujeres y la prostitución forzada y la violencia física, sexual y psicológica ejecutada o tolerada por el Estado.

martes, 23 de noviembre de 2010




Pistolas de juguetes, un peligro oculto!!!




Pedro García, Ciudad natural.
Por. Jeudith Rodríguez.


Es común ver en estas temporadas navideñas como las calles de la ciudad natural del Distrito Municipal de Pedro García y del país se llenan de jovencitos portando pistolas de juguete en una versión especial que tiran unas bolitas mortales o frustrantes, y es que una bolita de esas disparada a un ojo es un infortunio que podría costarle la vista.

Los jóvenes usan estos juguete como una forma de iniciación en practicas delictivas y de violencias, que mas luego se reflejara en una sociedad copada de violencia, en épocas anteriores las autoridades prohibieron los juguetes bélicos, pero ya al parecer la han dejado en cesantía y sin efecto, las tiendan comercializan estos juguetes sin ningunas restricciones, y es justamente aquí, donde se pone de manifiesto el lema que dice ‘’los intereses de la minoría están por encima de los intereses de la mayoría’’ esa misma mayoría que tendrá que cargar a cuesta la pesada cruz de la desgracia.

Solo hay que ver en la forma en que agarran la pistola, con la emoción que la soban y como apuntan se conjuga con un disparo excitante, y es que ellos quieran cambiar este juego por la que en si dispara, verles como amenazan es una cosa que mete miedo, el problema va desde las irresponsables autoridades que permiten su comercialización en las tiendas, hasta los  descuidados padres que sin darse cuenta le compran o permiten que sus hijos se metan en un lio de por vida, y es que los mas aficionados estos juguetes bélicos son los niños de 12 a 15 años.

Autoridades competentes prohíban ya la comercialización de los juguetes bélicos, Estas pequeñas acciones son las que hay que ejecutar para tener una sociedad saneada, desde el inicio de la vida misma, después no se lamenten cuando maten, roben, usen drogas y sean fieles contribuyente de las sociedades de violencias.